Cultura pop

Britney Spears, libre y con nuevos ímpetus

Ilustración: Manuel Cabrera.

La cantante Britney Spears logró liberarse -después de trece años- de la tutela abusiva de su padre, James Parnell Spears, que la mantuvo presa y como una alcancía de dinero para toda su familia. Este año ella recuperó su libertad. 

El tutelaje comenzó en el 2009, después de dos años en los que Britney tuvo una sobrecarga de trabajo, que la llevó a padecer quiebres en su salud mental y, por lo tanto, en su comportamiento.

Britney Spears. Fotografía: Getty.

Todo lo que hizo durante ese tiempo fue fotografiado y sirvió para acosarla, como cuando se rapó la cabeza e inmediatamente se ve al espejo y comienza a llorar.

Britney Spears. Fotografía: Backgrid.

Después atacó a paparazzis que la acosaban para conseguir una fotografía; fue objeto de burlas y memes. 

Su presentación en los premios MTV, con la canción Gimme More fue tachada de aburrida y descuidada. Como si fuera poco, después Britney perdió la custodia de sus hijos. 

Britney Spears en los MTV. Fotografía: Getty.

Un año más tarde fue internada en un psiquiátrico en contra de su voluntad y no quiso devolver a sus hijos en una de las visitas. La justificación del padre para pedir la tutela de Britney era que consumía drogas. Entonces él y su abogado la reciben, de manera temporal. 

Al año siguiente la tutela se tornó indefinida y James Parnell Spears empezó a controlar la fortuna y la carrera de la cantante, su hija.

Lynne Bridges Spears, Britney Spears, James Parnell Spears. Fotografía: Getty.

Su tan esperado regreso, por todo lo alto, se dio con el álbum Femme Fatale. La intérprete fue alabada y llamada otra vez “la diva del pop”. 

A Femme Fatale le siguieron álbumes como Britney Jean (2013) y Glory (2016). En este periodo no se mencionaba, ni se hablaba sobre la tutela bajo la que se encontraba. Pero este no era el caso de sus fans más devotos. 

Discografía de Britney Spears. Fotografía: Britney Spears.

Las teorías 

En los años siguientes se hablaba de lo abusiva que era la tutela de su padre, pero como teorías de conspiración. Siempre se tachaba, a los que se referían al tema, como locos o extremistas, y que veían algo que no existía. 

En el 2019, la cantante publicó que tenía que darse un break de su residencia en Las Vegas, por la salud de su padre, lo que luego se desmintió y fue porque desde ahí todo fue en picada. 

Los fans comenzaron a comentarle a Britney en su Instagram: “Si estas cautiva en contra de tu voluntad usa algo amarillo”, y en el siguiente posteo, la cantante casualmente utilizó ropa con ese color. 

Después de eso se creó el movimiento Free Britney, con el que miles de fans de Spears, alrededor del mundo, pedían que la tutela de su padre concluya.

El movimiento Free Britney

Los fans comenzaron a reunir más pruebas en contra de la tutela y de lo controlador que era su padre. Así fue como muchos fanáticos se reunieron en el Ayuntamiento de Hollywood para pedir la liberación de la cantante del centro psiquiátrico.

Después se supo que ella estaba internada en contra de su voluntad. Luego, la misma Britney  habló sobre su bienestar y la dieron de alta. La jueza a cargo del caso pidió una evaluación detallada de la tutela. 

Dicha tutela implicaba que no podía votar, usar su dinero, conducir, casarse o ser madre; no podía tomar decisiones sobre su carrera, ni ir de compras sola o, peor aún, dar entrevistas sobre lo que ocurría. 

Movimiento Free Britney. Fotografía: Getty.

La tutela se recomienda para gente con demencia o ancianos (según su estado de salud), pero Britney no tenía estas características. Por eso los abogados de su padre trataron de convencer a las autoridades que ella tenía principio de demencia. 

Lo contradictorio es que una persona -con principio de demencia- no puede lanzar cuatro álbumes, realizar tres tours mundiales, residir por cuatro años en Las Vegas y ser jueza de X Factor

Filtran el caso de tutelaje

En 2021, salen las primeras filtraciones de la audiencia a la que asistió Britney y donde se expuso los motivos por los cuales debía terminar la tutela. Ella reveló que toda la familia era cómplice de los maltratos que le había hecho su padre. 

La hermana y madre de Britney sabían que la tutela era abusiva y no hicieron nada por ella, pues la cantante pagaba sus cuentas y vivían de su dinero, el cual ella no podía usar sin el permiso de su tutor. 

Ese día a Britney se le concedió el permiso para contratar a su propio abogado y pelear por su libertad. 

“La razón principal por la que estoy aquí es que quiero terminar la tutela sin tener que ser evaluada”, sostuvo Britney.

Hay que añadir que a la cantante se le administraba fármacos en contra de su voluntad, para mantenerla somnolienta. 

Ella declaró que sus fans fueron los que le dieron fuerzas para buscar su libertad. Esto confirmaba que las teorías -supuestamente de conspiración- eran ciertas y nunca fueron un delirio.

Su libertad

Mathew Rosengart fue el abogado que representó a Britney y el que litigó por su libertad. Luego la cantante pudo comprometerse con su novio Sam Asghari. 

Britney Spears y Sam Asghari. Fotografía: Getty.

En este periodo también se lanzaron documentales como Framing Britney Spears y Controlling Britney Spears, los cuales contaban las diferentes maneras en las que Jamie controlaba a su hija, colocando equipos de vigilancia en su cuarto para espiarla, por ejemplo.

El padre de Britney renunció a ser el tutor legal y la atención se centró en su hermana Jamie Lynn, quien anunció su libro Things I Should Have Said, lo cual enfureció a los fans de la cantante, porque nunca hizo nada para ayudarla. 

Jamie Lynn (izquierda) y Britney Spears. Fotografía: Getty

La cantante posteó en esta red social: “Sé que la tutela está a punto de terminar, ¡pero aún quiero justicia!”. Britney le respondió a su hermana, en Instagram, que nunca la ayudó.

En noviembre de 2021 se puso fin al tutelaje. Jamie Spears presentó la solicitud de la terminación del mismo y así fue como acabó la opresión que Britney padeció por años.

Libertad y boda  

Luego de conseguir su tan preciada libertad, Britney agradeció a todos sus fans que la apoyaron y que lograron que sea posible, algo que ella creía que nunca iba a suceder.

Una de las primeras cosas que hizo la cantante fue comprarse un iPad con su dinero, porque nunca la dejaron.

También firmó un contrato por 15 millones de dólares para el lanzamiento de un libro con sus memorias. Anunció que pudo quitarse el diu (dispositivo intrauterino), que le obligaron a usar y que, además, estaba embarazada. Después de dos meses tuvo un aborto espontáneo. 

La pareja se casó en una ceremonia privada en Los Ángeles el 9 de junio. Ningún miembro de la familia Spears fue invitado, incluyendo sus dos hijos. 

Britney Spears y Sam Asghari. Fotografía: Shutterstock.

La boda de Britney y Asghari fue foco mundial cuando se supo que Madonna, Paris Hilton, Drew Barrymore y Selena Gomez fueron invitadas. Se mencionó, entonces, que mujeres icónicas apoyaban a una mujer icónica, pues no la dejaban ver -en el periodo de la tutela- a sus amigas. 

De izquierda a derecha: Donatella Versace, Paris Hilton, Britney Spears, Madonna, Selena Gomez y Drew Barrymore. Fotografía: Instagram.

Horas antes de la boda, el primer esposo de Britney intentó interrumpir la ceremonia armado de un cuchillo. El hombre fue arrestado y Spears colocó una orden de restricción. 

En julio de 2022, se anunció que Britney volvería a la música después de seis años del lanzamiento del álbum Glory, pero esta vez con Elton John. Juntos grabaron una nueva versión de Tiny Dancer, llamada Hold me closer, la cual se hizo pública el 26 de agosto. 

Britney Spears y Elton John. Fotografía: AFP.
Video de YouTube de Elton John.

Sin embargo, los problemas continúan, pues Britney ha tenido muchos desacuerdos con el padre de sus hijos, quienes en las últimas semanas declararon que su madre era inestable y debería estar bajo tutela.

Pidieron que rezaran por ella y filtraron un video donde la cantante está reprendiendo a los niños, como toda madre a veces tiene que hacer. 

Britney respondió que le entristecía saber cómo sus hijos fueron envenenados por su familia y exesposo, tan solo porque ya no le sacarán dinero como lo hicieron cuando estaba en tutela.  

Les recordó que ya mismo cumplirán la mayoría de edad y que no les iba a dar un centavo más.

También añadió que ella ya no creía en Dios y ahora es atea. Justificó esta decisión en que cuando estaba controlada por su padre, Dios no hizo nada por ella. 

Britney ha empezado a vender las propiedades que su familia compró -con su dinero- para beneficio propio. Primero fue la de su hermana, un condominio que decía que era de ella, pero que fue comprado con el dinero de la cantante.

Sin duda Britney ha tenido que recorrer un largo camino hacia su tan anhelada libertad, la cual no pudo alcanzar sola, pues los primeros en darse cuenta fueron sus fans, quienes salieron a protestar a las calles con carteles rosas. 

Movimiento Free Britney. Fotografía: Getty.

Esto deja sentado un precedente en la industria de las tutelas, pues en Estados Unidos son consideradas un negocio redondo para controlar a personas de la tercera edad y estas compañías exprimen su patrimonio.  

El caso de Britney no es el único y tampoco será el último; otras celebridades han estado en tutelas o se encuentran bajo ellas. 

Como el caso de Amanda Bynes, quien después de una niñez explotada en el medio artístico, tuvo en su adultez episodios de quiebres en su salud mental que fueron públicos, por lo que fue colocada bajo tutela, a cargo de sus padres.

Amanda Bynes 2012. Fotografía: Getty.
Amanda Bynes. Fotografía: Paper Magazine.

Pero ahora también enfrenta los mismos problemas que Britney y aunque ya está rehabilitada, no puede disfrutar de la tan añorada libertad.