El 30 de agosto de 1937, nace la escritora Mary Wollstonecraft Shelley, quien también fue dramaturga, ensayista y biógrafa británica.
Ella fue reconocida por ser la autora de la novela gótica Frankenstein o El moderno Prometeo, considerada la primera novela de ciencia ficción moderna que inauguró ese género.
Fue hija de la feminista Mary Wollstonecraft, quien escribió en 1792 Reivindicación de los derechos de la mujer, y del filósofo William Godwin.
En 1818 publicó Frankenstein, que se convirtió en una de las novelas más influyentes de todos los tiempos.
Además, fue autora de Valperga, Las fortunas de Perkin Warbeck, Lodore o El último hombre, un relato de la futura destrucción de la raza humana por una plaga, considerado por muchos como su mejor trabajo.
¿Cómo nace Frankenstein?
En 1816, Mary, Percy Shelley y Lord Byron hicieron una apuesta para ver quién podía escribir la mejor historia de terror.
Mary, tal y como narra en el prólogo de la edición de Frankenstein de 1831, lo imaginó inspirada en una pesadilla que tuvo a los 18 años y escribió la novela.

Esta obra fue todo un éxito para una autora de solo 20 años, que recibió las mejores críticas del público.
La historia de Frankenstein, estudiante de lo oculto y de su criatura subhumana creada a partir de cadáveres humanos, se ha llevado al teatro y al cine en varias ocasiones.
En 1819 escribe Mathilda, un relato incestuoso que no vio la luz hasta el año 1959.
Su novela El último hombre (1826), considerada lo mejor de su producción, narra la futura destrucción de la raza humana por una terrible plaga.
Mientras que Lodore (1835) es una autobiografía novelada.
“No deseo que las mujeres tengan más poder que los hombres, sino que tengan más poder sobre sí mismas”
Mary Shelley
Además, escribió biografías de personajes de España, Portugal y Francia.
Tras la muerte de su esposo, Percy B. Shelley, en 1822, Mary se dedicó a difundir la obra del poeta. Publicó así sus Poemas póstumos (1824) y editó sus Obras poéticas (1839) con valiosas y detalladas notas.
Su muerte
Mary Shelley falleció el 1 de febrero de 1851, en Londres, mientras dormía, a causa de un tumor cerebral. Su última voluntad fue ser enterrada junto a sus padres. Descansan en el cementerio de St Peter, Bournemouth.
Su figura ha sido objeto de varias biografías, una de ellas escrita por Muriel Spark en Mary Shelley (1987) o por Miranda Seymour en Mary Shelley (2000).

En el 2018 apareció En busca de Mary Shelley”, biografía escrita por Fiona Sampson.